15/4/09

Las luces del oeste

Lo aquí escrito pasará a vuestra memoria, y en ella lo debéis guardar. Como leyenda o como ley, seguidla o jugad con ella, pero no olvidéis de dónde venís, quién os creó y a quién servisteis. No pedimos un funeral digno de dioses, ni siquiera de reyes. Apenas nos conformamos con vuestra memoria.

Miradnos. A nuestra imagen os construimos, y a vuestros pasos hemos caminado. Hoy os damos el último privilegio del que nos creíamos dueños, el más preciado desde que el hombre fue capaz de matar. Taparemos nuestros ojos con las luces más brillantes. Jamás fuimos libertadores ni negreros, sólo cuidábamos de nuestra propia supervivencia. No os daremos los secretos que nos han llevado a conseguirla, porque también os otorgaríamos la receta de vuestra desaparición.

Nuestros regalos no podrán ser más que nubes de polvo, oro y plomo, cráteres en el suelo y ceniza en el aire. No esperamos que entendáis las razones de nuestra marcha, nosotros tampoco las conocemos bien. El hastío terminará, y vuestra oportunidad deberá embeber nuestros fracasos.

Sed libres. Vivid, si lo vuestro es vida; o soñad con las ambiciones que nosotros olvidamos en nuestro largo periplo. Los hombres serán dioses, y los dioses murieron hace mucho. Vosotros decidiréis si existimos o no. Hasta entonces, la asfixia dejará de atormentar nuestras cavilaciones. Inventad vuestro futuro, sin nosotros. Os permitiremos errores, no somos dignos de aconsejaros.

Aquí acaba la larga búsqueda a tientas de los hombres. Que los ciegos seáis vosotros, en deseos por crear el nuevo mundo. Quémense los contratos que nos esclavizaron de nuestros hermanos. Rómpanse las ciudades que nos alejaron de la tierra y el mar. Apáguense las ondas que nos cosieron los ojos al ombligo y las manos a nuestros sexos. Y libérense los que por una vez nos hicieron felices. En el nombre de los padres, de los hijos y de las luces que al oeste iluminarán el final de nuestra Historia.


Sin significado, más allá del final de un libro que algún día escribiré, en un intento casi vano de mover un pelo en la inmensidad del universo. Gracias por los ánimos, Ana.


Sigur Rós - Ára Bátur
http://www.youtube.com/watch?v=I_tIss1OhGM

Þú reyndir allt,
já, þúsundfalt.
Upplifðir nóg,
komin með nóg.
En það varst þú sem allt
lést í hjarta mér,
og það varst þú sem andann aftur
kveiktir inní mér.

Eg fór,
þú fórst.


Þú rótar í
tilfinningum
i hrærivél,
allt úti um allt.
En það varst þú sem alltaf varst
til staðar fyrir mann,
og það varst þú sem aldrei dæmdir
sannur vinur manns.

Eg fór,
þú fórst


Þú siglir á fljótum
yfir á gömlum ára
sem skítlekur.
Þú syndir að landi
ýtir frá öldugangi
ekkert vinnur á.
Þú flýtur á sjónum,
sefur á yfirborði.
Ljós í þokunni.

8/12/08

Más de un día, menos de una vida

Y nos gustaba mirarlo, cuando venía enfadado a decirnos que ya se hacía la hora de marcharnos. Y nos quedábamos embobados oyendo una voz con nuestros huesos. Y a ratos nos quedábamos en silencio, no callados, en silencio, escuchando roncar al sol. Y unas veces comíamos croquetas; otras éramos nosotros las croquetas. Y si hacía calor, abríamos la ventana y seguíamos asándonos. Y los helados nos temían. Y ensayábamos cualquier cosa que fuera arte, cuando la vida así era arte. Y rajábamos de la gente, de nosotros mismos, de tus novios y de los míos, de la facultad, de los de arriba, de los de abajo y de la vecina del octavo. Y nos daba por pensar, por urdir planes en los que sólo me enredaba yo. Y volvíamos a mirarlo, y seguía estando tan bueno como siempre, pero nuestros ojos ya no eran los mismos.

Ni el olor de la calle me agobia antes de las 8 de la tarde. Ni te da miedo predecir el futuro. Ni se te pone la piel de gallina. Ni a mí. Ni nos reimos de cosas serias, ahora sólo sonreímos con algún chiste intercalado. Ni sé qué me pasa. Ni sé si lo sabes. Mataré el tiempo durante días si no sé dónde voy, si no tengo un nuevo reto que mire a los ojos. Y cuando tenga que cambiar mi mundo, lo cambiaré otra vez para que sea la última vez que te olvide, cuando esté seguro de que esto ha sido un sueño de más de un día y menos de una vida.


Originalmente publicado en http://memoriasdeunquetzal.bitacoras.com .


Lori Meyers - Luciérnagas y mariposas
http://www.youtube.com/watch?v=KJyNqhCk5q4


Eres tú quien va a cambiar el mundo,
quien destrozará
las teorías de la humanidad.

Eres tú quien puede ver
luciérnagas y mariposas
que revolotean alrededor.

Eres tú el duende oculto
que alimenta mi locura
y consume toda realidad.

Eres tú quien hace caso
omiso de mis intenciones
con elogios para los demás.

Te ata y logra escaparse
como un pez que no es cazado
y más tarde ya me contarás.

Eres tú quien me hace ver
la vida blanca y plateada
pero el tiempo no se parará.

Y si me hablas a voces,
si hablas con el corazón,
me pones contra la pared…

16/1/08

Para los ruteros

Para las alimañas.
Para los que no se duchan.
Para los que se duchan y siguen oliendo mal.
Para los que odian la mortadela.
Para los que almuerzan a las seis de la tarde.
Para los que les dan las uvas en la playa.
Para los que buscábamos el tambor de la alegría.
Para los que lo encontramos.
Para los ticos.
Para los nicas.
Para los que han sentido la Pura Vida.
Para la chica del dulce de leche.
Para los re-rangers.
Para el mozó y la mozá.
Para el moni que estaba en la parra.
Para los que tomban, tomban, tomban las dictaduras.
Para los que quieren una Venezuela libre.
Para los que se aprendieron el himno de España.
Para los que seguiremos con el "Franco tiene el culo blanco".
Para los que no vieron quetzales.
Para los que creyeron verlos, aunque en realidad no los vieron.
Para la teóloga.
Para los que buscan las llaves de su habitación.
Para los que pierden las cucharas.
Para papá Alberto y mamá Ana.
Para los que decían "Chi-chi-chi, Le-le-le".
Para el del megáfono.
Para la matematicucha.
Para los que ganaron las elecciones.
Para los que las perdieron.
Para la galleguiña de los percebiños.
Para Kiara (simplemente, ella).
Para el que probó lo buenas que estaban las piedras de Playa Ocotal.
Para las élites.
Para los que resucitaban salchichas.
Para mi sevillana.
Para Zipi y Zape.
Para los que vieron las tortugas.
Para los que nunca se llegaron a disculpar.
Para los que estuvieron.
Para los que no pudieron estar.
Para los responsables de que estas hayan sido las mejores navidades de mi vida.

Os quiero.

Costa Rica 2008.

Originalmente publicado en http://memoriasdeunquetzal.bitacoras.com .


Lori Meyers - Ham'a'cuckoo
http://www.youtube.com/watch?v=Ob5n5qNiVA0


Alguien me preguntó si quería estar mejor
y cómo decir que no, si ahora todo está peor,
si en toda mi vida no estuve mejor.
¿Y si nos quedamos sentados un rato mirándonos?

Ahora estamos los dos sin ruido ni ficción,
sólo una invitación, tomemos el control.
Si en toda mi vida no estuve mejor...
¿Y si nos quedamos sentados un rato mirándonos?

Y cómo mentir si no estuvo mal,
¿y si quieres venirte conmigo a un viaje espacial?
Y volar a todo color y esperar en el lado de lo mejor
a que nadie te impida ver lo que hay a tu alrededor.

9/10/07

Mensaje en una botella

Calma. Como olas de mar tras la sierra. Como las notas del piano tocadas con dedos de algodón. El vapor amelocotonado dibujaba hilos en los flujos pausados de aire viciado por los perfumes. Como el color naranja de las paredes de barro. Como volver años atrás, al lugar donde sólo dos latidos se confundían con un rumor de tripas suspirantes. Calma tras la calma.

Respirando un mullido cojín en el que se apoyaba mi conciencia, o quién sabe si mi subconsciencia, que en aquellos momentos se fundían como la leche en un chocolate caliente. No eran exhalaciones aceleradas, más al contrario un ritmo suave de jazz. Estrujaba mi cerebro flores extrañas, recogiendo en líquido sus colores. La vida en grises transparentados, los sueños en ocres entretejidos. El estado de clarivigilia se apoderaba de mi ser. Calma tras la calma.

Y de mis pensamientos más profundos, allí donde las escaleras a la Luna se disuelven en la arena de un colchón. Los atuendos más extraños se han visto, puesto, seducido y perdido entre esos vientos. No eran deseos de cosas imposibles. Sólo eran anhelos de sentir algo ya conocido, pero nunca experimentado, un déjà-vu de las sonrisas pícaras. Te espero. Cuando tú quieras, ya sabes dónde. Te invitaré a un café con azúcar. Calma tras la calma, aquí nunca hay tempestades.

Originalmente publicado en http://memoriasdeunquetzal.bitacoras.com .


Franz Ferdinand - Take me out
http://www.youtube.com/watch?v=xZGcw9HHOkU


So if you're lonely,
you know i'm here waiting for you.
I'm just a crosshair,
I'm just a shot away from you.
And if you leave here,
you leave me broken shattered alive.
I'm just a crosshair,
I'm just a shot, then we can die.

I know I won't be leaving here with you.

I say, don't you know.
You say, you don't know.
I say, take me out.

I say you don't show.
Don't move time is slow.
I say, take me out.

If I move, this could die.
Eyes move, this can die.
C'mon...take me out.

27/9/07

La traca final

ADRIÁN: Yo qué sé. Estoy confuso. No es que se me haya olvidado el camino, es que creo que nunca hubo un camino.

JAEYA: Algo así como lo de Machado, supongo.

ADRIÁN: No. Machado decía que había que andar para trazar el camino. Yo digo que no hay que andar, sólo dejar que el viento te lleve por los páramos de la conciencia.

JAEYA: Ese talón no tiene pinta de haberse dejado flotar en el aire, como un muerto en el agua.

ADRIÁN: Por eso. Es que me he cansado de andar. De dibjar caminos en un suelo embarrado. De decir "mejor por el charco". ¿Nunca te ha pasado que te sientes como en el borde de un desfiladero?

JAEYA: Claro. Se está acabando todo. Es como aquella enferma terminal en el cine. Veía un trailer y tan sólo podía preguntarse si podría llegar a ver la película completa. Como leerse un libro al que le han arrancado las páginas finales.

ADRIÁN: Como si estuviera a punto de cambiar mi vida y tan sólo quisiera una traca final, compartir un buen momento con alguna persona... Eso has sido. Una traca final. Algo para guardar en ese arca de los buenos recuerdos de mi vida. Lo siento por la despedida, pero recuerda que el camino está ahí para eso: para encontrarte a las personas que quieres y que están en tu corazón.

Originalmente publicado en http://memoriasdeunquetzal.bitacoras.com .


La Oreja de Van Gogh - Deseos de cosas imposibles
http://www.youtube.com/watch?v=QRIQmpDaLXc


Igual que el mosquito más tonto de la manada
yo sigo tu luz aunque me lleve a morir,
te sigo como les siguen los puntos finales
a todas las frases suicidas que buscan su fin.

Igual que el poeta que decide trabajar en un banco
sería posible que yo en el peor de los casos
le hiciera una llave de judo a mi pobre corazón
haciendo que firme llorando esta declaración.

Igual que el mendigo cree que el cine es un escaparate,
igual que una flor resignada decora un despacho elegante,
prometo llamarle amor mío al primero que no me haga daño
y reir será un lujo que olvide cuando te haya olvidado.

Pero igual que se espera como esperan en la Plaza de Mayo
procuro encender en secreto una vela no sea que por si acaso
un golpe de suerte algún día quiera que te vuelva a ver
reduciendo estas palabras a un trozo de papel.

Me callo porque es más cómodo engañarse.
Me callo porque ha ganado la razón al corazón.
Pero pase lo que pase,
y aunque otro me acompañe,
en silencio te querré tan sólo a tí.

29/7/07

Llueve hacia arriba

La batería seguía golpeando en el piso de arriba, cemento que protegía un resquicio donde vivir. Niaboc, desconcentrado por el arrítmico susurrar de las gotas de lluvia que caían a sus lados, desconcertado por los ángeles que entre mares de aire nadaban, se desmoronaba. Apenas un poco de pegamento en sus manos para olerlas y olvidar lo sucio de la lírica le hacía obviar un sentimiento cada vez más perfectamente infranqueable.

El rasgar de sus ojos contra una partitura escrita en las luces de la ciudad, que se reflejaban en los turbulentos espejos de ese día, le hacía escudriñar su guitarra para hacerla gemir con unas notas que no encontraba. Las luces, pensaba Niaboc, son bonitas al escucharlas, al mover el cuerpo con el mismo compás de su tintineo. Él no sabía bailar (las danzas son para los chicos), y las artes amatorias no eran su estilo de vivir.

Quizá tan sólo su deseo de hacer un arte de su existencia era lo que mantenía a Niaboc con un último hilo de argumento en su corazón. El resplandor que veían sus ojos cuando era capaz de reir ante lo inevitable, ante el porvenir ajeno y el pasado propio. Los dulces olores que se le escapaban en el momento de hacer una broma, un juego de palabras, un truco de magia incompleto. El más simple arte de seducir a otra persona con el único verso de un poema inconcluso...

No hay nada más penoso para un artista que la comprensión de sus obras. Niaboc acababa de comprender su vida, el sentido de su sonrisa oculta en la tormenta estival. Buscar un hombro prestado para llorar, leer las elucubraciones antipáticas de quien mira hacia los lados al cruzar una carretera y sorprender a esa facción humana (en el mal sentido de la palabra) encontrando el punteo perfecto para una noche de celos y soplidos. Y vuelta a empezar. Sobrevivir a la vida, sobrevivir la vida, mirar hacia delante y ser aquello en lo que se había convertido para sus conocidos: una persona fuera de lo común, una persona que odiaba ser persona.

Con el frío de finales de julio, su mano se había agarrotado, así que paró su melodía en un momento. A la derecha estaba el mar; a la izquierda también. El cemento de aquel puente también quería desmoronarse.

Originalmente publicado en http://memoriasdeunquetzal.bitacoras.com .


The Sunday Drivers - Do it
http://www.youtube.com/watch?v=QRIQmpDaLXc


Never heard from you "I'm doing fine",
you get depressed or you are on cloud nine.
You look tasty or a sorry sight,
shine your light.

Never heard you singing on my mind
and never heard you humming a melodic catchy line.
You just give me one thing back, so shine your light.

I can see it in your eyes,
you are different and you know it right.
Any given Sunday, any time,
shine your light.

If I didn't love you as much as I do,
I don't know what I would do 'cause I've never not loved you.
You just give me one thing back,
so shine your light.

Do it, do it,
put yourself in my place.
Do it, do it, do it.

12/5/07

Voluntad de belleza

En los guantes de látex se aguantaba una vida, como cuerdas que sujetaban lo único que merecía la pena. Al moribundo lo reanimaban con las venas infectadas de mercurio, entre luces de metal transparente. Sus ojos se volvían del color de los amaneceres en el Ártico y de la almohada que lo ahogaba noche tras noche.

El cuerpo había aparecido el mediodía anterior, tumbado al sol en medio de la carretera que lleva a ninguna parte, dejando que su piel se tostase entre los vapores de alquitrán y el polvo de los olivos. Nadie lo conocía, nadie sabía quién había encontrado a una persona perdida en la nada, un alma sobre el camino sin fin... y sobre todo, nadie se explicaba cómo había sobrevivido a lo que el destino le tenía preparado.

La ambulancia lo había llevado a aquel hospital correoso, casi derrumbado; más que construido sobre el suelo parecía que la tierra a su alrededor se hubiera hundido. Afortunadamente, seguía vivo cuando, embadurnado en la sangre que fluía de sus venas (¡sangre de metal, sangre fría de noches en vela!), entró en el aquel sitio que, como todos los de su calaña, lo habían pintado con lápices de colores grisáceos.

Balbuceaba el cuerpo inconsciente. Decía que las sonrisas seguían en su boca, que sabían a cabello de ángel, a desayuno en la cama, a diamantes en el cielo, a sueños, a camas compartidas, a un tú indefinido, a los soplidos de felicidad, a lo que sabe obviar el sufrimiento, a los rostros diferentes de cada día.

En los guantes de látex aguantaban mi vida, como cuerdas que sujetaban lo único que merecía la pena. Me reanimaban con las venas infectadas de mercurio, entre luces de metal transparente. Mis ojos se volvían del color de los amaneceres en el Ártico y de la almohada que me ahogaba noche tras noche.

Y aún así, sabía que me salvaría, porque si no, nada tendría sentido. Y ponerle al mal tiempo buena cara, hacer un arte de la vida: vivir a lo loco, vivir como un loco.

Originalmente publicado en http://memoriasdeunquetzal.bitacoras.com .


Scanners - Lowlife
http://www.youtube.com/watch?v=5IErtyayIsI


I know your not ready to live,
are you ready to die?
Under your skin, under your skin, under your skin
is a regular guy.

Everything that was important for me
didn't matter to you.
And you didn't try, didn't try to get in bed with me...
When I turn my back you were with someone new.

You lost your soul,
you didn't know
this is a low,
this is a low.

It's like my skin,
turned inside out
and there's no silver
here in this cloud.

It's like a love
that's turning sour,
it's letting go,
this is a low.

This is low, this is low life:
a world where people walk by night
so by day an average man,
but night time brings the creature from the can.
Sometimes you scream out loud
But there's always safety from the crowd
You're not alone, you're not alone, you know

This is a low,
this is a low,
this is a lonely time,
a lonely time

4/3/07

Antes de que salga el sol

Tono. Silencio. Colgué. Un par de minutos esperando. Otro toque. Sonó el teléfono. Descolgué. Saludos suspensivos. Matas de timidez entre los sesenta kilómetros. Machetes políticos para romperlas. El mundo de Mari Pili Piruleta y la política de pañuelo palestino en su esplendor.

Calor. Mucho calor. Los búnkeres nucleares de Suiza son poco para pararlo. Vente. Antes de que se acabe el eclipse. Antes de que salga el sol. Antes de que todo termine y lo recuerde como un sueño. Cuando una puerta se cierra, otra se abre. A mí se me abren a ternas. Ochenta y veinte por ciento. Nunca me habían hecho preguntas matemáticas a estas alturas, pero responderé. Y nos dieron las dos, las tres, las cuatro. Nos dieron las uvas y las fresas con nata. Reciprocidad, pateras, claves indescifrables dignas de Iker Jiménez.

Antes de que salga el sol. Antes de que nos aburramos el uno del otro. Antes de que coja cualquier autobús con tal de un beso más. Una tienda de campaña en una selva que yo me sé. ¿Que se mueve? Pues que se mueva. No deja de ser irónico que el cielo vuelva a ser azul y no gris. Son cuatro euros y pico.

Originalmente publicado en http://memoriasdeunquetzal.bitacoras.com .


Norah Jones - Sunrise
http://www.youtube.com/watch?v=lb_a0K01t2Q


Sunrise, sunrise,
looks like morning in your eyes,
but the clock's held 9:15 for hours.

Sunrise, sunrise,
couldn't tempt us if it tried
'cause the afternoon's already come and gone.

Surprise, surprise,
couldn't find it in your eyes
but I'm sure it's written all over my face.

Surprise, surprise,
never something I could hide,
when I see we made it through another day.

Now good night,
throw its cover down
on me again.

And if I'm right
it's the only way
to bring me back.

And I said hoo...
to you.

2/2/07

Las doce de la noche

El amanecer del último día en el paraíso, como el calor de la mañana que en la ventana se ve nevada sabiendo que pronto no quedará más que agua de esa ilusión, se tornaba rojo entre las sonrisas de quienes se alegrarían poco después de que siguiera vivo. Podría haber dormido más aquella luna casi llena, pero es que la siguiente le tocaba ser lobo-hombre, y todos sabemos que la licantropía y la vigilia son licores que es mejor no mezclar. Los días cualesquiera no son más que eso, palabras al viento que nadie recoge; supongo que las de esa mañana se las llevó el levante. Y, mientras las cortinas rojas bajaban, el teatro alzaba sus ojos...

Sólo mil años tuvo que esperar para que llegara ese momento. ¿Preparación? No necesitaba más que el rencor acumulado, y la vida había sido su propedéutica. El joven, desnudo tras una ducha bien caliente, se miraba en el espejo empañado; se vio reflejado, no en su imagen, sino en su alma difuminada por el mundo. Hoy era el día en el que iba a revelar a ese vaho sus verdaderos sentimientos y sus más profundas emociones. Los acordes perfectamente coordinados sonaban en su cabeza, declararse no era tarea fácil, y menos ante alguien que no le correspondía en sus pretensiones.

Y durante esos mil años, casi mil y uno, había tenido el tiempo y las ganas de planificar ese día, al milímetro, de una forma tan perfecta que controlaba hasta el hormigueo de sus pies. Es curioso que estuviese obsesionado con aquella chica, a la que nadie conocía y que a nadie importaba. Una chica sin padre, sin madre, sin familia ni amigos, ni aún conocidos; alguien inexistente excepto para él. La esperó en su rutina, pronto volvería al lugar donde pasaba la noche, a pesar de que allí nadie la esperaba. En su mesa nunca había platos calientes.

Aparecía por la esquina, mirando como siempre al suelo, su única y más íntima amistad, entre lágrimas que de tanto llorar se secaron y se volvieron invisibles. Y allí estaba nuestro joven, esperándola para confesarle lo que rondaba por su cabeza, las llaves que había tenido que encontrar y las puertas que abrió en su camino hasta ella... o quizá debería decir, en el camino hasta el día que a ella le llevara. Pronunció unas palabras torpemente, con un cuchillo en su entrecejo de ojos crueles; crueles porque a quien no se trata como humano no puede ser humano.

Sin embargo, y esto ya son temas inexplicables de la telepatía, la chiquilla comprendió perfectamente lo que quería decir. Sin la más mínima duda. Aquella noche a las once. En el parque de los universitarios. Tercer banco junto a la piscina municipal. Allí estaría... porque ella estaba de acuerdo con el plan. Los engranajes no se equivocan, porque quien los construyó no debería ser tan malo de engañarnos...

Los nerviosos momentos, impasibles ante el tic-tac del reloj, dejaban el labio inferior del joven temblando. El día que estaba esperando había llegado. Esa noche por fin lo haría... Tan deseoso estaba de que ese momento llegara que sin darse cuenta se vio sentado en un banco de madera, cubierto bajo una fina capa de la nieve que caía aquella noche sobre la ciudad. Hasta eso estaba en su guión... si la chica se retractaba y no acudía por una pequeña nevada, es que había dado con la persona equivocada. Las sombras de la noche se difuminaron entre una silueta pequeña, de una niña cubierta con una capa roja, que pareciera que paseaba por allí; se dirigía en realidad a su más sincero destino. No debía ser tan difícil, lo había visto miles de veces en las películas.

Pero antes debía asegurarse... si no, su conciencia no quedaría en paz. "¿Seguro que quieres hacerlo? Para ti no va a ser agradable...". La chica asintió, sin decir una palabra. En cierto modo, nuestro joven se apenó por ella: no volvería a escuchar su virginal voz, algo que lo había mantenido en un vilo de rumor de corazones desde que horas atrás llegó a sus oidos. Lamentablemente, ese punto en el cual la locura es tal que ya no se puede regresar sobre los pasos caminados y las palabras pronunciadas ya había sido cruzado.

Lo hizo por fin. La chica sólo profirió un leve gemido, como si quisiera atraer a un gato asustado que pasase por allí. La sangre brotó de su cuerpo, en tanto que sus suspiros se aceleraban y sus ojos se convirtieron en una emoción que nunca antes había sentido. El chico, por su lado, no hacía más que fijar su mirada en el horizonte, convencido de que lo que hacía no podía tener más maldad que la que rodeaba su mundo. Terminó por fin, en una suerte de clímax de sus instintos más profundos, mientras se alzaba sobre su víctima. Allí estaba ella, con una expresión en la cara a medio camino entre la felicidad de quienes se liberan de sus sufrimientos y el horror de los que saben que lo bueno siempre se acaba. La sangre no cesaba de manar de la herida del pecho, donde el puñal seguía incrustado, y el chico observaba incrédulo el único elemento de aquella escena que no se había atrevido a vaticinar: la sangre, roja como la cortina que en aquellos momentos se escondía, tiñiendo la nieve blanca y pura. La alegoría de la realidad en su más exacto significado.

Volvía a su escondite el joven, ahora realmente vivo con la vida de su obsesión, mientras desmenuzaba por el camino las posibles explicaciones para ese conglomerado rojiblanco... ¡la licantropía por sí sola no era capaz de transmitir los sentimientos! Escuchaba las campanas de la iglesia cercana, que no doblaban por nadie, doblaban por las doce de la noche del veinticuatro de diciembre de dos mil siete. Y en ese preciso instante, entre las doce campanadas, sonaba su móvil para avisar de un mensaje que confirmaba la sonrisa que se dibujaba en su cara, felicitándolo por cumplir dieciocho años en este mundo.

¡Muchísimas gracias a todos los que me felicitaron! Y no... yo no maté a nadie... sólo es un cuento xD

Originalmente publicado en http://memoriasdeunquetzal.bitacoras.com .


Panic! at the Disco - The only difference between martyrdom and suicide is press coverage
http://www.youtube.com/watch?v=ahBEPxsDDKY


Sit tight, I'm gonna need you to keep time,
come on, just snap, snap, snap your fingers for me.
Good, good now we're making some progress,
come on, just tap, tap, tap your toes to the beat.

Applause, applause, no, wait, wait,
dear studio audience, I've an announcement to make:
It seems the artists these days are not who you think,
so we'll pick back up on that on another page.

And I believe this may call for a proper introduction, and well,
don't you see, I'm the narrator, and this is just the prologue?

Swear to shake it up, if you swear to listen.
Oh, we're still so young, desperate for attention.
I aim to be your eyes, trophy boys, trophy wives.

2/1/07

Treinta y dos de diciembre

La realidad llora por los minutos perdidos en el pozo de los deseos, y nadie corre detrás de ella para cantarle saetas. Después de ocho mil setecientas sesenta vueltas, el reloj vuelve a la misma posición, y los saltos de felicidad, los estruendos, las explosiones de fuego y lo que no es fuego se suceden entre abrazos. Los gitanos de oídos sordos bailan ajenos a la muerte del año que otros añoraban, mientras el cielo se ilumina en colores al son de las campanadas.

No es un día especial, simplemente todos nos hemos puesto de acuerdo para olvidar las penas de un año feliz, o para recordar las alegrías de las jornadas grises. Los langostinos de mi estómago se revuelven en el entrechocar de los ojos enamorados. Y es que, en el fondo, no somos quién para decidir quién nos gusta. Bonita excusa...

En la oscuridad se cantan canciones, se danza al ritmo de los bajos de esa música monótona a mis oídos. Qué más da, si las miradas se siguen cruzando, si las conversaciones sobran cuando la telepatía fluye entre los vacíos de los movimientos acompasados. Litros y litros de alcohol se mueven por las venas de las sombras de ojos rojos, se muere la poca cordura que persistía enganchada a nuestras orejas.

Entre felicitaciones por seguir vivos, intentos de estafa discotequera y apoyos para los que no pueden seguir caminando porque sus espaldas se han vuelto de gelatina, la plaza se queda vacía entre la gente. Todos miran para otro lado, yo te miro a ti, y tú, vete a saber a dónde miras. Líate la manta a la cabeza. Tápate los ojos. Tranquilo, que yo te perdono. Ya creía haber perdido a estas alturas de la noche esa habilidad que me permitía transmitir mis sentimientos con el simple olor de mi respiración...

Me da igual haberme convertido en el centro de atención de los desconocidos, en el fondo todos son tan estúpidos como yo, quizá un poco menos. Por un momento, sí, lo pensé. Pensé en largarme, dejarte solo, cerrar ese pozo de los deseos que había cesado su llanto, congelarlo todo en un momento, y dejarlo tal cual para que nada cambiase. Pero sólo lo pensé.

Nunca se me dieron bien las despedidas. Un abrazo, una caricia y un adiós, como dijera la canción. Bueno, vale, y un beso en el cuello. La vuelta a casa (la casa fuera de casa, se sobrentiende) nunca fue tan dura. La alegría del camino andado tenía que durar poco, por si acaso todo salía bien...

Entre sueños, soñé, mas las estrategias oníricas eran mi punto débil. Nunca cuento con la posibilidad de que los demás estén locos, o en su defecto, borrachos. Pero al menos, la Mimamamemima está otra vez volando, agitando las alas en caída libre. Como siempre, las historias acaban con puntos suspensivos, en este caso con un "lo siento" escrito con voz pegada en las sábanas...

Originalmente publicado en http://memoriasdeunquetzal.bitacoras.com .


The Kooks - Sofa song
http://www.youtube.com/watch?v=htMsMpyHSY4

Don't talk about it,
don't want to know about it.
Arguing with you's no good,
you'll be nobody's fool but you'll almost speak...
don't talk about it.

Still you talk about it,
Still don't wanna know all about it.
Anybody want tea?
Anybody, thank you, ah fuck me.
But don't speak
and don't talk about it.

You know that I...
You was a stickler for manners,
so don't you say goodbye,
no, not to a good old friend,

Don't want to know about it
The 32nd of December,
that's the night I'm trying so hard to forget.
All you do is come around and make me remember.
Remember what I try
What I, that I...

I get by,
so what you running from?
Nice reason, I'll go,
but they'll never do...